Las camisetas viejas aún pueden servirnos de algo.Las convertimos en trapillo y nos dan mucho juego.
Yo voy a hacer un tapete salvamanteles para evitar que las cacerolas calientes o la cafetera quemen el mantel o la mesa sobre la que las apoyas.
Coges la camiseta y la cortas en tiras, como haciendo una espiral. No importa si tiene dibujos o alguna decoración.
Para que las tiras no se enreden y se hagan nudos las hacemos ovillos.
Con una aguja de ganchillo de 6 mm. hacemos una trenza de cuatro cadenas usando las tiras de las camisetas como usaríamos el hilo o la lana.
La cerramos en un círculo uniendo el primer y último punto.
He elegido empezar por el color claro pero vosotros podéis empezar con el oscuro si os gusta más.
En la siguiente vuelta haremos dos puntos bajos por cada uno de los de la 1ª vuelta.La 3ª vuelta la completamos haciendo un doble punto bajo sobre cada tres de los de la vuelta anterior.
La 4ª vuelta hacemos doble punto en uno de cada cinco.
En la 5ª vuelta cambiamos el color. No cortes la tira que dejas porque nos vendrá bien en el siguiente cambio.Al hacer la primera cadena de subida para empezar la vuelta, la hecemos con el cabo del otro color.
Si ves que se va doblando el tejido hacia dentro (hacia nosotros) disminuimos la distancia entre doble punto y doble punto.
Y si se dobla el tejido hacia atrás, aumentas la distancia entre los dobles puntos.
Cuando hemos terminado dos vueltas volvemos a hacer el cambio de color.
El criterio es siempre el mismo.
La foto de la derecha es del revés del tapete. Veis que las costuras de las tiras se van quedando por este lado.
Si no necesitas un tamaño muy grande, ya tendrías el salvamanteles hecho.
También puedes hacer una vuelta más y hacerlo un poco más grande,
Cada uno que elija su opción.
O puedes escoger otros colores.
¡Hasta la prox.!
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